viernes, diciembre 02, 2011

Egipto

Nunca habia tenido tanto miedo en mi vida.

Dicen por ahi los neurobiologos que mas o menos a los veintitres anios de edad uno desarrolla la region del cerebro que le permite asimilar las consecuencias de sus actos y por ende empieza a concebir la nocion de su propia mortalidad.

No hay cosa mas espantosa que correr de la masa enfurecida y alimentada por un incentivo incierto.
En arte estudiamos mucho el comportamiento de la masa, esa perdida de individualismo convertido en vomitada acida de personas sin identidad propia acarreadas por un impetu extraordinariamente terrorifico... es la receta para lo impredecible.

Una cosa es lo que te pasan en CNN, otra es lo que te pasa frente a tus ojos.

Nuestra primera experiencia con el gas lacrimogeno fue algo que nunca imaginamos.
Yo, por reaccion inmediata ante el subito rompimiento del suenio profundo, me asome por la ventana para vislumbrar el tumulto inexplicable que se estaba conformando en la calle de enfrente a la una de la maniana y lo que vi fue lo siguiente: gente acumulada en dos bandos (uno frente a otro) armados de palabras violentas en la boca y piedras en las manos.

Lo pongo asi; lo primero que sientes es un filtro de tipo Hollywood cercandote la vision; solo te falta Matt Damon saliendo de la calle contraria en un tanque de guerra estadounidense para darte cuenta que lo que estas presenciando es en verdad una escena de una pelicula gringa. Pero lo que distingue esto de aquello es que no tienes una pantalla entre medio de lo que estas viendo; en verdad lo estas viviendo.

Regina se desperto. Juntas apreciamos la escena desde nuestra habitacion, encima de uno de los bancos mas conocidos de Egipto, en el condado de Aswan a bastantes horas de camion de la capital. Habian varias fogatas de objetos irreconocibles en el pavimento... y la gente seguia gritandose de un lado a otro de la calle, como si fuera un partido de tenis infernal.

Y luego humo, mucho humo.

Entro una mano de humo espeso al cuarto y nos atraveso por completo. Al principio crei que era humo de cuetes festivos (es la primera y muy ingenua impresion comparativa) pero despues de comenzar a experimentar la horrenda sensacion de alguien lijandome la garganta por dentro entendi, de inmediato, que se trataba de una sustancia agresiva al cuerpo humano. Comenzamos a llorar... pareciamos figuras de anime y al mirarnos al espejo (mientras nos enjuagabamos los orificios faciales) teniamos el rostro rojo; irritado por un combate completamente ajeno a nuestra conciencia.


Afortunadamente eso fue todo, por aquella noche.

Al dia siguiente despertamos ligeramente desorientadas y con una sed barbara para bajar y cuestionar a los intendentes del hostal. Resulto que el enfrentamiento de aquella noche habia sido un resentimiento (que debe tener alguna que otra conexion con el malestar general que se ha desencadenado desde el derrocamiento de Mubarak hasta la enfatica cercania hacia el periodo de elecciones) mostrado por parte de la comunidad Nubia (los capitanes de las embarcaciones egipcias turisticas denominadas coloquialmente "feluccas") en cuanto a la muerte de uno de sus camaradas por parte de un policia borracho (las versiones cambian de boca a boca) que queria forzar un pago de impuestos inventados por el; el capitan se nego y lo agredio con un cuchillo y como respuesta el policia le disparo... una semana despues (es decir, aquella noche) el capitan murio en el hospital y consecuentemente se desato una desconformidad que llego a inflarse hasta evaporarse (literalmente) en una nube de gas lacrimogeno, el mismo que respiramos Regina y yo en nuestro cuarto, a pocas horas de haber llegado al lugar mismo.

Y eso fue solo el principio.

sábado, noviembre 19, 2011

Cairo

Creía que siendo mexicana tendría una buena idea de cómo manejarme en más o menos cualquier lugar en el mundo. Estaba equivocada.

Cairo de noche es más que retador; llegamos antes de lo planeado, puesto que adelantaron el vuelo desde Amsterdam (nos dimos cuenta de pura caca), por lo que tuvimos mucho tiempo de colchón antes de nuestro siguiente vuelo. Optamos, consecuentemente, por caerle a la amiga francesa de Reggie en Giza para vaciar las maletas antes de mochilearnos el camino a Abu Simbel (de los puntos más al sur de Egipto, casi en la frontera con Sudán). Conseguimos sobrevivir a los señores acosadores de las áreas públicas; "taxi, madam?", "where you from?", "where you go?" que te siguen hasta el baño y le jalan por tí, y nos trepamos al shuttle para llegar a la terminal tres.

Lo aparatoso (pero al final genial) fue poder conseguir wifi para obtener el número de Chloe y hablarle desde el celular de alguien random (un ñor barbudo buena onda). Fue un "challenge completed" del cual estoy orgullosa; le hablamos y ¡listo! conseguimos su dirección.
Ahí empezó lo bueno, ya que saliendo fuimos acosadas por cientos de taxistas intensos y en piyama (descripción favorita de Reg) con chon en la cabeza gritándonos con el inglés más rudimentario que he escuchado (ya ni en Tailandia).
Finalmente escapamos de un taxi medio dodgy, siguiendo nuestro instinto, y nos metimos a uno pseudo legit, negociando el precio con la puerta entre abierta. Fiuff!
Lo gracioso de los taxistas egipcios es que nunca nadie sabe como llegar a ningún lado (me encantan las doble negaciones que me acabo de echar), entonces tuvimos que pasarle al dude por celular a Chloe para que llegáramos "con bien" a su respectiva residencia. Se bajaron unos amigos de ella para negociar el precio del viaje (echamos montón) y finalmente nos dejó ir sin violarnos como los taxistas mexicanos que te cobran trescientos mil pesos si sales de una zona de concierto... :s

El elevador parecía que se iba a caer y con él el edificio, pero logramos subir y saludar al resto para luego desempacar como queríamos. Fin.
Después de una cervecita intentamos dormir un rato para luego embarcarnos en el regreso al agrio puerco. Egipto nos había bienvenido con no tan mala cara; sus callecitas empolvadas nos dirigieron hacia la avenida principal y paramos mil taxis (a las cinco de la mañana...) y finalmente uno nos ofreció buen precio para el viaje.

"Ingresamos" maletas y pasamos a la sala de espera. Ya en el avión nos dimos cuenta que la descripción en el Lonely Planet de la aerolínea no era tan alejada de la realidad (le dicen "Egypt SCARE" en vez de Egypt Air"). Nos dieron squat para comer y mis tripas me suplicaban por algo de alimento: ergo muncheamos una barrita de amaranto (súper mexicanas) y bajando tragamos un Ensure cada una para no perder más tiempo.

De ahí agarramos el camioncito de turistas para el sitio arqueológico y diez minutos después LLEGAMOS!!

Abu Simbel está M-A-M-O-N-S-Í-S-I-M-O... Pagas, rodeas el cerrito con vista hacia el Nilo y PFFFffff, sientes que alguien te mete un madrazo visual cuando tus ojos topan lo impactante e impositivo de las mega esculturas de Ramses II y su familia... Te deja idiota.
El templo por dentro tiene muchas cámaras, todas están decoradas a morir con jeroglíficos de todo tipo, ¡retacadas!
Nos quedamos una eternidad contemplando la grandeza del potencial de construcción humano antiguo. El templo de Nefertari, a un lado del de su esposo es también una maravilla. No tengo palabras para describir dicha experiencia blu bla bel bi rar. Así.

Acabando los guías nos regañaron por tardar tanto y terminamos tomando un taxi para alcanzar el camión rural que salía de YA para Aswan (ciudad a tres horas donde nos quedaríamos a hostalear esa primera noche).
Entramos en friega loca y apañamos dos lugares, entre la multitud de árabes locales que se nos quedaban viendo por tomar el transporte no-burgués como el resto de los turistas Europeos y gringos nasties.

Hubo, literal, un sister friend que se nos quedó viendo TODO el camino (creo que se enamoró perdidamente de Regina) pero dormimos un rato y llegamos a buena hora a Aswan. Ahí caminamos por el malecón egipcio siguiendo el camino trazado por del Nilo (siendo a la vez acosadas ahora por los capitanes de las "feluccas" o barcas tradicionales egipcias) hasta que al fin dimos con nuestro hostal, ubicado arriba del banco nacional y con una vista de primeeeera.

Hicimos el chicken-check-in con el staff (amables y enpiyamados) y subimos para aventar las maletas aligeradas y DORMIR al fin...

NOT porque a media noche fuimos despertadas por el tumulto callejero sin control. Me asomé por la ventana y vislumbré una congregación de civiles justo enfrente de nuestro hostal, estaban gritándole a unos policías del otro lado, quienes a su vez echaban cuetes de algún tipo porque había humo y pequeñas fogatitas en la calle... NOT porque no eran cuetes sino GAS LACRIMÓGENO que entró por la chafaba y nos comenzó a picar la garganta y a hacernos llorar en catarata como monitas de animé.
Por suerte eso acabó pronto y pudimos lavarnos y volver a dormir. En la mañana nos explicarían qué había pasado.


Continuará

jueves, noviembre 17, 2011

Introduccion al viaje

Pensando en lo bonito que es lo sucio...

En esta ocasion relatare los hechos de manera distinta a la de siempre; mantendre el humor, claro, pero procurare sintetizar los debrayes etereos que me suelen caracterizar como una intensa de la escritura descriptiva, por razones de practicidad y por el bien de los nuevos lectores. Todo esto SIN ACENTOS NI ENIES. Las correcciones obsesivas se haran luego, cuando el tiempo no se me escurra por las orejas.

Llevamos escasos 4 dias en este desenfrenado pais y ya siento que he perdido el hilo de la logica con la cual se maneja el mundo a traves de los sistemas funcionales de organizacion humana colectiva (Ay Gooeeeeyy). Siento que el rizoma me come de lleno cual falafel de puestito de calle, sin agua pa' tragarme suavecito.
He de creer que, si sobrevivo a esta explosion de n'importe quoi de forma de vida, podre volverme una viejita experta en las sociedades pseudo caotico-funcionales del primer, tercer y septimo mundo. Me consagrare como consejera oficial dentro de unas decadas y unas arrugas gratis. Wait for it.

Ah, por cierto, Egipto es una patada en los ovarios. De esas que te hacen abrir los ojos para adentro y apreciar que hay mas que negro alla atras, al fondo del costal donde tienes arrumbadas los retazos rechazados de todo aquello con lo que no te gusta lidiar de frente, como cuando no cierras los ojos ante la enfermera que te traspasa la piel del brazo con una jeringa enorme. Es increible y no quisiera nada mas en este momento que vivirme hoy, ahorita, en este lugar.

Me parece hilarante (amo esa palabra porque siento que se deshace en tu boca como en hilitos de queso Oaxaca) como en el camino al aeropuerto iba platicando con mi buen amigo Diego, el emisario de las hispanias, sobre lo increiblemente enredadizo que es vivir en el DF (me encanto su concepcion de dicha ciudad como diseniada para MATAR a sus ciudadanos). Yo, como residente suburbana del reino de Juriquilla, no puedo mas que opinar lo mismo pero al reves, puesto que es mi ciudad. Pero es una posicion dificil la de vivirtelas de turista (cinco anios ya...) en el lugar a donde perteneces segun tu nacimiento y papeles; ahora viajo para ser residente y local de un pais en donde nunca antes habia estado, por unos momentos cuando menos.

Perpetua de a ratitos.

Aca les va el recuento de aquello que les ha acontecido a dos mexicanas indefensas e inadvertidas, con tan solo su humor incontrolable como escudo contra las infinitas y evolventes peripecias que presenta el explorar el continente africano... Godspeed, my fine lasses!


Fin del preludio mudo e incoloro :)


viernes, julio 01, 2011

Cromos: de fobia a filia. Capítulo I

ROJO
Entré al vagón con el corazón colgándome por el lado equivocado. No podía creer que había conseguido el último boleto para el tren nocturno que me llevaría de la costa a la capital; después de haberle rogado al lánguido individuo detrás del mostrador con un español jadeante entintado debajo de una retórica tropezada y patética logré que presionara el botón de "print" (un tanto renuente y malhumorado) y ahora leía la tira de papel coloreado que me había permitido el acceso a mi supuesta salvación: el final que debía tener mi tan caótico viaje por el viejo continente.
Esto significaba que todavía existía una sutil e intermitente posibilidad de que llegara a tiempo para el despegue y consecuente regreso a mi tan narcotraficada Ithaca. Ahora nada más faltaba que alguien me contestara desde el otro océano vía celular con la clave de mi boleto de avión, ah, y también tenía que encontrar la manera de descifrar las entrañas gástricas del metro de Madrid para poder arribar al bendito aeropuerto, antes que nada.
Frente a mí apoyaron sus robustos cuerpos sobre un indefenso asientito dos escandinavas inmensas, masticaban algún tipo de botana grasosa y asintían con la mirada, en una especie de saludo desganado.
Tomé las botellas de vino casero que llevaba cargando desde aquella Italia y las coloqué a mi siniestra, junto a la ventana. Procedí a envolverlas con mi sudadera e intenté conciliar un sueño inmundo e hipócrita "ya casi, ya casi" me decía desde adentro, para calmarme las ansiedades que se me escurrían por debajo de los calcetines.
Habiendo fracasado retomé mi posición inicial, para lo cual me percaté que ahora tenía a un individuo extra sentado a mi diestra, con un aire que se antojaba interrogante. Me saludó verbalmente en castellano y me preguntó algo que no recuerdo porque no me interesaba involucrarme en una plática justo en ese entonces, no tras haber tenido esa calidad de día.
Miré por la ventana pero el negro de la noche no me sorprendió con sus usuales farandulerías imaginativas; mi cerebro había levantado su banderita blanca de "pidos" y sólo se escuchaba algo como "hay un problema con la transmisión debido a mal tiempo, favor de esperar con paciencia hasta reanudar la programación". Nieve de televisión y nada más.

El sujeto, en su incesante necedad por intercambiar verbos, se volvió a referir hacia mi persona con determinación y optimismo. Después de contestar en crescendo no tuve otra opción que fijarme en su semblante: era un chico quizá un año mayor que yo, pelirrojo, coqueto, pecoso, alto, sonriente y esbelto. "Este wey ¿qué?" murmuraron mis múltiples personalidades, pero la totalidad de mi ser estaba más allá del cansancio, oscilaba en el "ok, lo que sea, que me lleve la marea".

Inesperadamente me encontré involucrada en una conversación que pronto se convertiría en una de las más trascendentales de mi pequeña e insignificante historia como humana; comenzando por nuestros países de origen hacia Platón, circundando lo abstracto de la música en el arte y lo efímero de los libros en nuestros estómagos y la posible existencia de una escondida pero tajante narratividad épica en la vida de las personas, sobre todo de algunas cuantas solamente.
Paulatinamente me fui percatando de facilidad con la que me podía comunicar con este individuo, me fue enredando con acento ibérico ceceante de do a do. Y para colmo no pude más que notar un tenebroso paralelismo entre su existencia y la mía: ambos de padres de ciencia y agnósticos (ahora maestros), su interés por la música y el mío por el arte a manera de estudio, color de pelo (yo en el pasado como él), preferencias de libros, de música de películas, de deportes, de comida, de forma de vestir... algo me hacía sentir como que estaba viviendo un capítulo de "the twilight zone", por lo cual me cohibí y me retiré a mi propio espacio para contemplar la infinitud de la nada en silencio solitario y absoluto.
Miento. Seguí el hilo de la plática hasta que pasó la señorita encargada de anunciar que era hora de dormir y que consecuentemente apagarían las luces de los vagones. Las ballenas caucásicas de enfrente emitieron un sonido ininteligiblemente desagradable, como en voz de "shushhhhhhh".

Se acostó ocupando ambos asientos, invitándome a emplear su brazo derecho como almohada. Accedí, por alguna razón me sentía en confianza para no salir corriendo y esconderme en el baño para evitar ser violada por un completo extraño.

miércoles, marzo 09, 2011

Running out of time, into space

Y si no duermo se me sube la mitomanía, porque aterrizo en vivo desde un sueño lúcido y no distingo entre realidades. Pero me siento más de la otra.
Y te escribo porque te pienso, pero realmente no te escribo a ti sino al fondo de pantalla, al papel tapíz del cuarto azul con verde, ese que nadie usa y en el armario se esconden todos mis fantasmas junto a un cepillo de dientes que no tiré. Me escribo a mi misma.
Le escribo a la mancha de refresco en la madera del que vivió aquí antes, quizá tirando suspiro como yo ante el negro de las cortinas.
Y hace diez años que no te escribía, trece exactos pero diez suena más a que está escrito por alguien que sabe. Años que son como moneditas de diez centavos y me van llenando los agujeros de los pantalones hasta que me traga la soberbia del haber leído a Cortázar boca arriba y casi sin emitir respiro alguno.

En la mañana atropellaron a un perrito y me acordé de aquella vez que le recé a dios para que curara al perrito negro del vecino, también hace diez años y el putazo que le metió un tsuru blanco mientras yo dibujaba con crayones viendo por la ventana. Y los gemidos. Y se murió de todas maneras porque se me olvidó rezarle la última noche.
Es entonces cuando me acuerdo de todo y no me acuerdo de ni un carajo.
No sé si se me decompuso el termostato de la cabeza o se nos pasó la fecha de caducidad,
Pero sé que soy como una cacerola mal lavada; un taco de cochinada que se le cayó a alguien porque no cabía en el plato
Y me levanto y me sacudo pero quedan restos de tí por todos lados.
Un té de manzana con canela y el departamento de tu abuela, lleno de mundo y olía a mundo y a polvo de conocimiento.
Y me quedan cachitos de ti hasta por debajo de las uñas, como migajas de tinta indeleble que me como para no perderme de todas ellas quienes he sido.
Tatuajes metafísicos en una desnutrida rampante- Ay! Pero si eso no lo he escrito yo! no me pertenece y no me corresponde tal retórica de pretensión hipstereana.
También te escribo y te confieso que me lavo la codicia con lijas del 650 para arrancarme la sensación de que me estás viendo, desde el otro lado del taller, desde el otro lado del continente.
Abro la boca pero mis palabras se ahorcan las unas a las otras, como taxistas enfurecidos por el tráfico. Pienso en coches y pienso en aquel vocho blanco, ese que tenías lleno de estampitas de luchadores. Ese vocho y que lloro porque se lo lleva mi tío y me voy a vivir al norte donde la tierra es blanca en invierno y no está mi abuela para decirme que jugar fútbol es para niños.
Pero de pronto me interrumpen tus besos susurrados de media noche, y te empujo porque me aplastas y nunca duermo cómoda porque me roncas en el oído, pero me gusta porque me acuerdo del mar, que también fue novio mío.
Y si no duermo me desquicio porque las ideas se me quedan como globitos de helio amarrados a las orejas.

Me tengo envidia a mí misma porque soy una perra y una puta y me veo en imágenes secas e impresas de hace un año y digo; "qué puta soy"
Y les arranco mi nombre porque me da vergüenza y me arranco la vergüenza y le pego encima la orilla de ese maldito septiembre y la banca frente a la iglesia y el barro de Zacatecas.
Y el parquecito de la esquina cuando decidimos que ya no éramos los unos de los otros y "se vende" y "vendido" y el helado de Amaretto que a nadie le gusta más que a mí.
Y el puto frío de mi cama.
Me cuelgo del techo y me sacudo, pero no me tiro de yo misma, por más que corro me alcanzo y por más que me pierdo ahí me encuentro yo sola.
Es entonces cuando te pienso y te escribo.
Y por más que le grito al estilógrafo no me responde ni madres, las pelusas y los azulejos se me quedan viendo y me dicen que en verdad soy una puta.
Y le grito a la estufa y le grito a mis agujetas y le grito al señor de la basura y al de los tamales oaxaqueños. Y me río, entubado porque soy dictadura del PRI.
Y también soy poeta de caño y en el caño empezó lo bueno porque a alguien se le ocurrió jalarle a su sueño de vida y me lo encontré aquí y lo planté en una botella de Boing con suciedad y mi nostalgia.
Es por eso que soy la planta de marihuana de tu ventana
Soy mi cama en el piso y un viaje en pesero a CU mientras llueve y se me olvidaron mis llaves
Soy la pendeja que te quiere
Soy la desnudez de la mañana y un par de pájaros moribundos
Soy una playa desolada llena de basura y un barquito de papel que se estrella contra un pañal flotante.
Una orden de hotcakes de figuritas y un viaje a Jalapa.
Soy tú cuando no te conocía y creía que la barba te hacía ver mayor.
Soy tú cuando me dijiste que mis besos te eran ajenos, pero yo sólo me acordaba de leer a Sócrates y de aprender a quererte a poquitos. Tan Olímpica esa Villa en su explanada y los perros que la recorren.
Soy las cosas que se te aparecen y nadie más ve, porque tienes ojos de caleidoscopio roto.

Soy la estúpida que creyó que al aventarte por la azotea regresarías estampado en un papalote.
Creo en mis cuentos para niños,
Porque el sol de tu cabeza me persigue a todos lados.

Eres con quien quiero verme entre las arrugas de una cama dentro de 50 años y reir por cómo el tiempo nos ha masticado el ego, vencido, y somos de arándano cactáceo: pasitas desérticas platicando sobre Joseph Beuys y los viajes que hicimos, y los hijos que tuvimos.

Y soy tu familia, la que nunca pudiste ver porque los dos nos tapamos los ojos mientras nos jurábamos que nos queríamos entre otras mentiras que se nos ocurrían.

Soy la cuarta oportunidad, la tercera y la segunda. Te me escurres por los dedos como arena errante, yo soy tu arena errante. Soy la que dice "..." nada, porque se lo llevó el viento.
Y también soy la que dice:
"Esta es la historia que nadie contó porque nunca pasó", la que escribo porque me sale por los poros de los pies, y la recojo y la enrrollo con mis intestinos, como cuadritos de un papel baño que se deshizo por accidente.

Y acabando esta última línea me daré cuenta que no fui yo quien escribió todo esto.

jueves, enero 27, 2011

TIT

Thailand... tight-land? tideland? Name it how you will, all who've been there will remember nothing else but the Land of Smiles.

First arriving in Bangkok I felt like being transported to another dimension, I was completely out of my homey habitat; everything I knew about the world was now worth monopoly paper, plus taxes.
Cars I knew, the sky I knew, streets and buildings and other humans I was familiar with but pink cabs? Meat lollipops?? Baby elephants bathing in the sea?? Undecipherable road signs all around?

Asia in general can be an existential slap in the face, you go there, coming from the Western side of the World, and you inevitably start questioning everything you've done so far, as well as the methods you've used; suddenly you feel a splash of warm water rinsing away rationality from your the very core of your being.
But Thailand, oh dear... Thailand is the queen of all exceptions, it is the place that questions how you think the human world should work. Us foreigners have a special way of justifying this unique phenomenon by using the acronym "TIT"; meaning: This is Thailand. Works like a charm.

Every time someone serves you a dish you in fact did not order (some times providing you with the exact opposite of what you asked) you HAVE to think for yourself; TIT. And you have to eat whatever is in front of you! No crying allowed!

Every time millions of small motorbikes rush past you at outrageous speeds almost killing defenseless pedestrians, and of course, each other; TIT.

Oh, and those times when there comes a certain particular holiday in which every single person on the street (including grandmas) starts tossing water (in all its categories: bucket full, ice, using water guns) at you for no particular reason!: TIT.

Every time you ask someone for directions and you receive a nod (apparently acknowledging your request) but in fact they give you baloney because they actually did not have a clue of what you were talking about, and were kind of shy to admit it (and yes, you end up being completely lost and vulnerable to newer mistakes)... need I ever say it again? TIT people, TIT.

When the shrines where the Thais honor the spirits are filled with soda bottles (especially Fanta, I think they are quite fond of the brightness of the color). TIT.
When little children walk around carrying a giant snake on their shoulders (Britney Spears like)... geez: TIT!

When the hottest girls in the night clubs are in fact perfectly disguised GUYS (which can be a bummer, even a threat to some of our fellow men)... TIT. Lady boy alert!
And don't get me started on the girls who learn how to make a weapon out of certain body orifices... I certainly shall not go into that but... TIT, TIT, TIT.

Oh, and last but not least... when every single teenage could potentially kick your butt (because they've all taken martial art lessons since BIRTH)... TIT.

Ironically you get to a point where things start to remind you of home, in a strange way... well, since I'm Mexican, I have been brought up with the colorfulness of the markets and the folkloric parades, and the strange religious rites disguised as catholic processions... so most things I see in the rural parts of the country are not that exotic to me as they could be to others, in fact they made me feel quite at home!

"You Mexican? You know Hugo Sánchez? Have free sticky rice!"- example #1 (during one of my visits to the local night market in Ban Phe, the gateway to Koh Samet).

So yes, I do recommend Thailand for people who think they've seen it all, even those who read tons of books and own a membership to the Nat Geo catalogs. It is a place that should be known by many of us, and it serves as a sort of refuge from the monotonousness of our routines (for a while, anyhow).
TIT everyone! And TTYL
Xalli

miércoles, noviembre 10, 2010

FML part 1

Why do we never use an image of us crying as a profile picture in Facebook or whatever?

I talked to one of my most special friends two days ago, and of all she said to me there was one bit that lingered in my ears like a voiceless echo, like that last taste of the strongest wine you've ever laid your tonsils in: if you feel it, then write about it.
Cheeseless or not I am sad, and sad am I; the saddest I've been in my whole life perhaps...

Hegel said that one must act (creatively so) in order to see what one is made of, hence our doings; marked as footprints on this earth, reflect like fuming mirrors the very essence of our beings. Our spirit hints its existence filtering itself through our actions, and printing them into organic ways of life for all eternity (if one is lucky). That is why I am in art school, even though I forget this from time to time.
On that note; I shall thus write about the things that make me want to stop living in this God forsaken city... then I shall read my writings and try to understand the whyness of the why I feel this way. And above all, sharing is important; because one can also be crazy and therefore ask 5 people the time before deciding it's 42 past 8.

Anywhoo...
I hate talking to people on the street, it's like I want to be a part of everything that goes on about but playing the part of the "live camera". I feel if I intervene with the characters then I spoil the moment, and everything turns too real to handle. Ironically I'm socially retarded (yes, I talk a lot and have loads of friends in my social networks, but I'm still a loser when it comes to communicating in spoken language).
This morning I did my daily routines, mantras and all and suddenly, when I was trudging down the stairs (thing which I do NOT do, because I use the elevator), after greeting the building keeper (having left a milk carton for the school girls in 4B to use for their annual carton-recollection contest) I realised I needed some freakin' change to get on the freakin' bus! (halt! as some of you might remember, I am car-less for another week due to an unfortunate encounter with a city road beast, hence all the public transportation usage).

You see, these new buses that drive along the Perférico highway charge 4.50 pesos. But the drivers don't handle the money, so if you go there and insert a 5 peso coin in the green slot, and then expect to get some change back they'll sarcastically, I mean "politely" point out to the shiny sign above your head that reads "don't talk to the driver". I mean WHAT IS THIS? ANIMAL FARM ON WHEELS? wtf. So anyways, I decided to buy us a lolly pop to get some change, right? So I got in the store that's nearest to my building and said hello and stuff, trying to mind my own business and then I bought one of those small milk cartons that make you shit easier (with this cold weather, its hard enough as it is). Go All Bran! I paid with a large bill and was given two smaller ones and ONE PESO.
I was gutted, so asked if I could get smaller and physical bits of that abstract representation of how MUCH we are worth in this life AKA "money" (I fucking hate it) and the dude behind the counter smiled and said "no can do, missy" with that face that reads "fuck off, I'm not gonna help you because you're a woman and look smaller and dumber than you really are". So I played it cool and said, "oh, then I want a lollypop" and handed him a 20 peso bill.

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That was it, he was furious. He snapped at me with a "oh no you didn't" sort of attitude and told me to buzz off, that if I wanted the freakin' lollipop then I could have it and then pay for it later. I tried to explain I needed change for the bus ride, but he just wandered off to someplace behind the coke fridge, smothering hate thoughts into amorphous mumblings.

I felt bad, I felt terrible; like if it was all my fault, I'm oh so insensitive for other people's interests. I always feel like shit when other people treat me so. And all I'm trying to do is get over with the stuff that needs to be done in order to get to school and back alive. It would seem simple enough as, but not in my world it isn't.

I counted my change, coin by coin this time as I walked to the bus stop, only to realise I DID have enough money to get on the COPESA... all that jazz for less than no cigar. I added STUPID to the number of thoughts wandering in my mind and hopped on the green and yellow bastard that takes me to Tepepan.

And to think I didn't even NEED that fucking milk carton, I had already packed my lunch and all. It's just that those bus drivers treat civilians like shit on toast, and it just doesn't feel right giving them that extra $.50 if they're gonna be all rude and mean... it ain't just.

Change is everything when you're a student. Like that clever sign on that clever movie that that clever hobo was carrying that said "keep your money, I want CHANGE". Holy smokes!

Then I got off where I was supposed to, after being stared at for being a girl who happens to be just an extra white to be using public transportation... who ever said we're all the same, I used to think that way...
I walked on and suddenly another blood rush to my brain: I needed YET MORE change to get on the second bus that takes me to school. Shit on a bucket! So I grabbed some more strength and decided to take my chances on this guy who was selling cookies and peanuts and grabbing chips with his probably unwashed hands and stuffing them into little plastic bags to be sold after. My OCD triggered, but I approached and said "Hey there, good morning. One question; could I have two 10 peso coins if I gave you this 20 peso bill?".
Funny enough he said "huh?" so I repeated the question, word by word. He smiled and said "dear, if you give me that bill then I'll have to give you TWO 20 peso coins, not one hahahahaha" and he continued to laugh while I apologised for something I had not said and walked on with TWO coins of that value I just wrote about.

A guy poked me in the eye on the way out of that second bus, and I yelled "STUPID" without being able to control myself... gosh. The funny thing is that when I complain about it at school, my friends tell me off with stuff like "it is what it is, if you don't realise it then that's YOUR problem".

I love this freaking city... makes me want to cry until I die, and then maybe take my own picture and post it on FB, not.

lunes, septiembre 13, 2010

CAMBIODEPIE!!!!!

Ando acá, en lugar de haciendo tarea, redactando otra reseñita del último concierto al que he asistido.
Siempre pasa ¿no? que nosotros los responsables (JA!) dejamos lo que nos gusta para el final... pues ¡MIERDA con eso! porque voy a escribir en vez de leer a Deleuze... y luego me sentiré popo por la culpa.
Me acuerdo de la primera vez que escuché a Switchfoot; fue justo por ahí cuando descubrí a Guster más o menos. Escuché de Guster "Careful" y me enamoré a la tercera escuchada, mientras que de Switchfoot vi el video de "On Fire" en vivo y a la quinta vez ya me la había aprendido de memoria :)

He de alegar que me sé cada una de sus inmundas cancioncillas al grado que tenían a mis padres hasta el coco-nut-o por ponerlas repetidamente en las largas travesías por coche.

"Ya pon otra cosa!"
"Nel, no me dejas manejar; entonces yo escojo la música"
"PERO TIENES 13 AÑOS!!!"
"Your loss"

Es curioso cómo al pasar el tiempo uno va mutando en cuanto a lo que le llama y llena; me he reconciliado con los champis (finalmente) y tolero un poco más los mariscos (yuck!). Pero musicalmente hablando desde entonces empecé a inclinarme por rumbos más "indie-buena-onda-wey" tanto por osmosis de mis amiguines enapos/TEC (que son lo mismo pero con distinta salsa) versión DF. Ahora un yeasayer por un previo Five For Fighting (lo sé, QUÉ PENA WEEE). Sin embargo, creo que guardo con cariño mis gustos de mocosa como guardo mis peluches: intactos y bonitos! Gustosos son los recuerdos de la infancia; me gustaba pensar que nunca me iría a traicionar a mi misma en cuanto a preferencias... creo que me debo una disculpa (a mis previos "yo" en plural). I've grown a little.

SWITCHFOOT MÉXICO-------------------------------------------------


Después de un nefasto breakup con el único novio que he tenido de la vida de vivir (2 años después) me lancé a Querétaro a ahogar mis penas en bonitos atardeceres y shots de mezcal con los pueblerinos que tanto amo (me, being one of 'em still)... fue un fin de BEERFEST (o BEARFEST, para algunos) increíble. Me curé al 70%.
De regreso fue que de MILAGRO DEL SEÑOR (cabe resaltar la ironía, puesto que SWFT es una banda de rock cristiano) nos tuvimos que desviar del camino para llegar a mi depa en plena lluvia, después de un ride a un amiguino a su casa-de-él en Polanco; acabamos en Insurgentes mentándole la madre al tráfico cuando de pronto vi un letrero magnífico... que anunciaba la llegada del grupo que llevo hablando desde el comienzo de este escritillo... creí que era obra de mi cansancio-cruda, pero NO! Al llegar a mi guarida solitaria prendí la chompu y en el interné ahí estaba: la confirmación de mi bendita revelación, patrocinada por la divina providencia (google); switchfoot vendría el 12 de septiembre!!!!!!! HOLY JESUS... SURFING ON A GUITAR!!!
Me apuré a anunciarlo en todos los medios electrónico-cibernéticos que tuviera al alcance, pero la respuesta fue agobiante; a nadie le importó un caraxo. Recibí cosas como:
"Mi madre es nazi", "Quién??? SuichHoot-er?", "Pff qué ilusa por creer que me gustan esas ma%$das", "vivo lejos", "si estuviera más rota sería un pantalón de Abercrombie" et al.

Así que sería yo sola y triste en mi desgracia... pero HO! porque Morra (qrotana ex-kennedy) asintió en todos los aspectos a mi súbita petición de servirme de acompañante al evento a pesar de vivir en Sacramento California (wtf??). Y ¡Vaya, que estaba igual de emocionada que yo! Así que le creí en su debraye de "me voy ahora mismo en coche" (right) y compré mi boleto decididamente vía mi querida madre y su tarjeta de crédito (jeje). It was ON!

Esperé el tiempo debido... comiéndome las uñas como rata enlatada y finalmente desperté el 12 con un aire de nueva persona. Me lavé los dientes y procedí a llevar a cabo mis quehaceres de ñora dominguera. Tic-toc-tic-toc-ticccccccccc AAAAAAAA ver la tele no me quitaba la emoción.
Pero bueno, FastForward a las 5:30------> YA! Salí desenfrenada con el coche y un mapita dibujado con Sharpie rumbo al salón José Cuervo.
Llegué perfecto por obra del Siñior trapero que me dio instrucciones y VOILÁ! embutí mi carrito de fricción entre un trailer macabro y un ficus asesino.

Me formé como los otros cien mil ilusos FANSSS rodeando la cuadra (me sorprendí por la cantidad de gente presente a dicha hora) y le mandé un mensajito a la norteña esperada. Llegó! y hacía años que no la veía, por lo que nos costó reconocernos 2 segundos más de lo normal. Luego luego nos involucramos en múltiples pláticas sobre y como en los viejos tiempos mientras se acercaba la hora del CHOW.
Entramos... yo me hacía pipí de la emoción... pero como siempre, te hacen aguantar vara mientras los señoritos del "ESTAFF" preparan el maldito escenario pegando cables en el piso y vocalizando el típico "1,2,3 probando probando" (me acordé de Nan recitando el himno nacional en el micrófono en nuestra obra de generación back in the day jajajaja).
Finalmente abrió pista un grupo extrañísimo llamado "el color invisible" y con 5 rolas de tutti-frutti ante lo cual el público se mantuvo inmóvil y nefasteado. Ha de ser horrible tener que tratar de ambientar a gente mala copa que espera a alguien más... y peor aún si son legionarios de Jesús Cristo ("J. C." que suena como Jay Z) auspiciados por el Opus Dei (o como sea que funcionan esos gremios locos). En lo que mi oídos se erosionaban ante las cumbias techno-surf de los dudes vestidos de luchadores me puse a analizar los alrededores y me acordé de la vez que había ido al previo "Salón 21" con Lori para ver a Bloc Party... good times-> cuando de pronto mi vista se centró en un señor vestido de figura religiosa en las lejanías del backstage porque ERA un señor-pastor vigilando a la multitud (WTF!!!! sentí que me observaba detenidamente susurrando telepáticamente "pecadooooraaaaa").
Le conté a Morra y reimos entre suspiros de miedo absoluto por ateas ambas dos.

Luego... otra hora después... bajaron un gran letrero en blanco con letras negras que anunciaba la llegada del gran grupo que ha compuesto tantas canciones utilizadas en chick flicks (entre ellas "A Walk to Remember" con MANDY MOORE... gsus) y salieron al escenario los sensuales hermanos Foreman y Chad Butler (el baterista) que también es sensual y el dude de los teclados que es nuevo y otro también que era repuesto del otro que tampoco sé cómo se llama :) WOOOOOOOOOOOW!!!! Estaba gritando más fuerte que la escuincla de al lado. Es grato cómo se rompe la barrera de realidad/ficción de imagen cuando VES en vivo por primera VEZ a la gente a quien has admirado por alguna u otra cuestión. Jon Foreman fue mi ídolo de ratos gachos de adolescencia guacareada, sus canciones simples y altamente positivas me dieron un gran toque de vitalidad y gracias a todo ello crecí a ser la Xallita que brinca como grillo en éxtasis cuando hay fiestas locas con los amigos de verdad. Rock on!
Abrieron con "Needle and Haystack" como era de esperarse y pisé mil veces a la ñora (wtf?) que me quería robar mi lugar en primera fila, hasta que dejó de joder. COÑO, POS ES MI GRUPO FAVORITO DE QUINCEAÑERA, NO IBA A DEJAR QUE UNA SENIL MALA COPA ME ARRUINARA EL MEJOR MOMENTO DE MI VIDA (ja, exagero, pero u get the picture).

Siguieron con Stars, Meant to Live, Oh! Gravity, Hello Hurricane, Gone, Only Hope (me acordé de nuestras primeras pedas de XV años bailando el waltz a esa rola), ON FIRE!!! (casi lloro con esa), This is Your Life, Mess of Me, Awakening, Free y de Encore nos deleitaron con The Sound y finalmente DARE YOU TO MOVE (ja, super busted porque esa sí que es girly as).

Nunca había visto a un vocalista crear tan buena atmósfera de concierto con tan sólo sonreir y mostrar excelente vibra a todos; nos tenía abrumados por lo bien que toca la guitarra mientras se avienta del escalón de la batería hacia las vigas metálicas del techo (o como se llamen) y cae en el clímax de la rola... fucking multitask dude... neta qué pedo, seguro toma clases de parkour y yoga en drogas finas.
Nos alentó a ser mejores personas, nos habló en español, nos hipnotizó con palabras mágicas sobre lo buena que es levantarte cuando estás hecho mierda y abrazó a la multitud del lado en el que yo NO estaba (fucker) para pedir que cantaran con él el verso que va así:

Cause everything inside looks like
Everything I hate
You are the hope I have for change
You are the only chance I’ll take
----
This is your life, is it everything you dreamed that it would be
When the world was younger and you had everything to lose

AAAA.... me dan ganas de llorar nada más de escribir estas tonterías (I'm a hormonal wimp, and proud!). Pero bueno, en realidad me resulta imposible describir la felicidad que nació en mi desde ese momento... me acordé de los padre que me sentía cada día al despertar y tener millones de posibilidades entretejidas en cada respiro que daba a lo largo del día. Switchfoot es mi cura para vivir en el DF y tolerar a gente estúpida que me podría arruinar la existencia. Pero sí se puede; tomo muy en serio eso de poner la otra mejilla (ha, toda cristiana de clóset) y aunque no vaya a favor de la iglesia como institución idiota, creo que es importante seguir lo que uno cree y estar orgulloso de ello, mi religión va de acuerdo a las sonrisas en los peores momentos y cómo sí se puede levantarte aunque un trailer te haya hecho papaya la cabeza. (Bueno, no literalmente).
Gosh!

Salí con tanta emoción que dejé que Morra fumara en mi coche jajajaja, le di ride a Taxqueña y recuperé esa sonrisa interna que me caracterizab aún en los tiempos que estudiaba historia, ya viviendo en esta ciudad tan difícil... aquí no se ven las estrellas... los dejo con esto:

Maybe I've been the problem, maybe I'm the one to blame
But even when I turn it off and blame myself, the outcome feels the same
I've been thinkin maybe I've been partly cloudy, maybe I'm the chance of rain
Maybe I'm overcast, and maybe all my lucks washed down the drain

I've been thinking 'bout everyone, everyone you look so lonely

But when I look at the stars,
when I look at the stars,
when I look at the stars I see someone else

When I look at the stars,
the stars, I feel like MYSELF.

FIN. Los amo (quien sea que haya leído esta cosa).

jueves, septiembre 02, 2010

comma

So once I met this boy
He had sunshine all over his untidy brown hair
Brown irises as well; my rabbit holes,
Nothing more, that there's nothing more,
And nothing was,
I tried to burn a smile over his elastic silence,
A seismograph on top of a jelly bean jar,
A rocket hammock, a door without a lock,
His twizzler like embrace, and my legs uncooked cinnamon branches,
And then an army of unused pencil cases,
A snail and a bull's eye and a blue pillow stain,
A ticket to the apple's seed, a trip to the coast on the back of a dragonfly,
As I grew younger and brighter everything was painted vanilla,
I was to be protected under his polka dot gaze,
A red cloak to shield me from all the vultures in the sky,
And the evil Eye, and the evil I...

I am forever a tiny clover in a field of untrimmed grass, in a field of broken glass

miércoles, julio 21, 2010

New Cork, better than Old Cork

I'd never been to New York before... I had only this mental image of the place in my mind due to all the symbolic references that lie inserted in endless pieces of Literature, Cinema, Theatre, TV, and the media as a whole... almost like an ever-present subtle whisper in the wind.
Virtually everyone I know has either spent a week there or just landed on one of the two larger airports; La Guardia + JFK (a more than 6 hour wait counts as a check mark!). Major convo starter, I'd say!
Physically knowing NYC opens you up to a whole new world. Matrix like; NOW you get that local joke that's been floating around in all those social gatherings and artsy-posh events. It's like finally getting the hang of double meanings in adult conversations (hehehe).
Fortunately I had already had my own very little training in the subject (city-handling-wise) due to the exercise of spending several hours in front of the "tele", visually slurping shows such as "Sex AND the City", "Friends", "Seinfeld", "Gossip Girl" (not really... but some, yeah, busted!), Woody Allen flicks, and just recently "New York, I love You" (Oh! for all those great looking men conveniently crammed in a single movie).
All of sudden those words I'd only heard of came to life, in a blast of information going straight to my brain: Broadway, 5th Av., SoHo, NoHo, China Town, Little Italy, The HighLine, Brooklyn... And so I was introduced to one of the planet's most actively evolving cities in the ART world.

Heck yes! Because this was no ordinary trip, no sirey! Me and my mate Dan are very very keen art students with a psychosomatic crave for anything that has the word CREATIVE involved in it. "HECTIC as!" Some would say, and they would be correct.
HENCE, we ate those museums like hot dogs at a Nathan's Hot Dog Eating Contest (*reference #1. See what I'm talking about? This happens in Coney Island, either google it up or just reminisce your head off!). MoMa was first, sweet and FREE thanks to some tips we got from a friend studying in Poughkeepsie (shit, that was hard to write, imagine spelling it drunk!). I cannot believe how much art these guys have got bottled up in a single building in downtown NY! My eyes were sore in the end, but not sore enough to detain myself from wandering around the gift shop hehehe.
Next on the menu was The Frick Collection, where our friendly "acquaintance" worked as an intern. Good stuff! Then we visited the Neue Gallery where we both stood open mouthed before no other than Gustav Klimt's "Adele (Bloch-Bauer)", and even better; I saw my very first EGON SCHIELE!!! (I still cannot get over that moment... the 15 bucks were totally worth it).
The day after we went to the Guggenheim where we saw a couple of works of Julie Mehretu, and the "Haunted" exhibit with Warhol, González-Torres, Abramovic, Rauschenberg, Sherman, and plenty more. Kasimir Malevich was there as well, in spirit and in work; for an entire floor of the museum was dedicated to his early paintings, which was cooooool.
After that we took two entire days to roam about senselessly through the infinite corridors inside the MET. Holy Kaw! I definitely could not process the whole content of what we saw those in such a limited amount of time... no human being could possibly ever! I mean, they say if you contemplate each piece for about 5 minutes you'd take up to 5 years looking at them all! I mean 'CMON!
What I reckon is that the museum is made for people who, after having visited the rudely humongous museum, will therefore have no further need for traveling outside the US. Period. (Although, I know this is BS, the experience of GETTING to places can never be replaced with incarcerated objects). CRAZY.
Anyways, The Noguchi Sculpture Garden was mind-blowing, the New Museum flabbergasting, the Brooklyn Museum was nice (Kiki Smith was there!), The PS.S1 MoMa incredible, and the Natural History was absolute CRAP! (one of the worst museums I've been to, absolute caca).
We walked everywhere during the day, and ate with as little money as we could spend (having taken trail mix for a very repetitive lunch until we went NUTS with the sun dried berries and all the almonds haha). And at night time we went out with our newly made friends (Poughkeepsie's very best). Flashback to:
THE FIRST NIGHT--> we showered thoroughly (the heat was intense!), changed from sweaty to dry clothes and met with "M-E" at one of NY's most popular streets (Bleeker... I think). We ended up hanging out with a bunch of very Jewish guys at this darkish bar with a wooden Apache statue greeting us at the door (the 7 dollar pitch was worth it, tho'). After a few drinks their "leader" ("A") decided we should move to his granny's apartment near Central Park, just for kicks... and so we did! Being all hyped by the feeling of adventure and... I dunno why else really, well besides the booze in our blood, which dictated our actions for the night.
When we arrived we found ourselves sitting down in old fashioned couches surrounded by old fashioned furniture and old fashioned family pictures... granma's lodge indeed!
"A" opened a drawer and brought out two peculiar bottles of what looked like ancient, and dangerous looking liquor; Amaretto and some sort of peach alcohol. We played drunken games and enjoyed ourselves thoroughly.
On our way back to the subway we were accompanied by a Spanish speaking dude with whom we shared a friendly chit chat while dodging random people lying on the street (this was 3:30am). It was then we confirmed the fact that NY does not ever sleep! People were already opening up their shops, riding the bus wearing their jogging gear... I mean, amazing...

TO BE CONTINUED...